Por: Elvia Villarreal De León
Muchos creen que me dejo llevar sólo por el corazón, que mi mente se nubla a razón de esta pasión, anoche sonreías durmiendo, tus brazos mi cuerpo cubriendo, tu pecho subía y bajaba, en un lento vaivén, mi espalda tocaba.
Después de otra entrega más, donde unimos el ahora y el jamás, donde nos fundimos en el placer, donde ésta pasión vuelve a renacer, pero lo nuestro no es sólo sexo y piel, es algo más que sólo de tu cuerpo tener sed, es algo más que con tu toque me haces sentir, es algo más que no sólo me hace gemir.
Cuando me besas cómo si nada, un beso dulce de madrugada, hay un destello en tu mirada que me dice que no estoy cegada. En el diario amanecer donde hay mil cosas por hacer, tu siempre me motivas a ver en todo maravillas.
Tu me has enseñado a olvidar el pasado, hacia el futuro caminar y todo lo malo perdonar, me has enseñado a vivir, a nunca olvidar el sonreír, que no sólo debemos existir, que todo tiene una magia que transmitir. Crees en algo superior que te llena en lo interior y actúas de acuerdo a tus creencias, no sólo eres apariencias.
Eres dulzura y eres pasión, eres sueños y razón, sé que me amas de verdad, que esa es nuestra realidad. Obviamente hay enfados, te quedas mudo y te haces a un lado, yo grito por todo y nada mientras tú sigues tranquilo, conservas la calma en lo que se desahoga mi alma.
Muchos creen que lo nuestro no es amor, que sólo somos sexo y pasión, más no importa si no lo entienden, sólo interesa lo que nuestros cuerpos y almas sienten.
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